Tagoror DigitalTenerife – 07/12/2016. El Cabildo de Tenerife, a través del área de Medioambiente, ha concluido la campaña de recogida de pollos de pardela cenicienta con la recuperación de 2.248 ejemplares que fueron liberados entre el 17 de octubre y el 20 de noviembre. La campaña fue organizada por el Centro de Recuperación de Fauna Silvestre La Tahonilla y la Oficina de la Participación y el Voluntariado Ambientales y durante la misma se atendieron un total de 2.322 ejemplares, con lo que el porcentaje de aves recuperadas ronda el 97 por ciento.
El vicepresidente y consejero de Medioambiente, José Antonio Valbuena, señala que “hemos tenido un gran éxito en la campaña gracias a la colaboración ciudadana. Hemos ampliado el horario de atención de 8:00 a 23:00 horas y han participado unas 60 personas, con lo cual ha aumentado el número de ejemplares recuperados”. En ese sentido, los municipios de Arona y Adeje registraron la mitad de las incidencias totales, con más de 600 aves atendidas en cada uno de ellos, mientras que el día 2 de noviembre fue el de mayor número de intervenciones realizadas, con un total de 224. A lo largo de la campaña se organizaron sueltas de pardelas con diferentes colectivos escolares y entidades locales.
La campaña contó con la colaboración del personal del Call Center, los vigilantes de Espacios Naturales y la Oficina de de la Participación y el Voluntariado Ambientales y el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (CECOES) 1-1-2 del Gobierno de Canarias. Además, hay que destac de la labor de los ayuntamientos, policía locales, Seprona, agrupaciones de protección Civil, entidades de voluntariado como A.D.A.E., Aprocica, P.C. El Rosario, Atina, Cruz Roja, Asociación Ecoturismo de Canarias, Asociación “In Situs” y Rumbo Zydae.
El objetivo de la campaña de recogida de pardela es que la ciudadanía conozca un ave marina emblemática asociada a nuestras costas y que presenta problemas de conservación, afectando principalmente a los pollos, sobre todo en esta época del año. La problemática de la pardela cenicienta radica en que los pollos, al salir de los nidos en su primer vuelo, son guiados por la luna y las estrellas hacia el mar. La contaminación lumínica de las costas hace que estos pollos se desorienten, cayendo en zonas de tierra urbanizadas desde no pueden escapar. Es en ese momento cuando la labor de la ciudadanía es importante para dar aviso a las entidades que se encargan del rescate y liberación de las aves.
