Los menores no son moneda de cambio, son responsabilidad de todos

03.07.2025 | Santa Cruz de Tenerife

Por: Francisco C. Barreto Rodríguez

Presidente de la U.AVC.

Muchas   están   siendo   las   voces   que,   desconcertadamente   nos transmiten el desconsuelo y abandono institucional al que estamos siendo sometidos todos y cada uno de los canarios. No les han basto, a   determinadas   personalidades   públicas   y   políticas,   la   polvareda jurídica   con   la   que   se   ha   tenido   que   enfrentar   el   gobierno   para modificar y adaptar el polémico artículo 35 de la Ley de Extranjería, para   que   una   situación   jurídica   a   la   que,   entendemos   y   hemos defendido   como   un   deber   de solidaridad   institucional   entre   las distintas Comunidades Autónomas adquiera un sentido impositivo, que igualmente, no quieren aplicar.

El abandono institucional a Canarias y a la Ciudad autónoma de Ceuta,   por   los   políticos   en   la   última   Conferencia   de   Presidentes, celebrada   en   Barcelona,   quedó plasmado como   una   instantánea sacada del propio acto institucional. El foro en el que se había puesto amplias   expectativas   para   impulsar   el   reparto   de   los   menores confinados en Canarias hacia las distintas Comunidades Autónomas, se   convirtió   en   otra   decepción   más.   Otra   espantada   de   las   ya habituales, en la que el ego partidista se superpone al interés de los menores y a la solidaridad institucional que en una democracia debede regir.

Afirmación   que   claramente   ha   quedado   evidenciada   en   la   última Conferencia Sectorial de la Infancia con la desfachatez de algunas Comunidades Autónomas y de la insuficiencia del propio Gobierno Nacional que, como asignatura que debería haber aprobado en el mes de junio, como era lo previsto para el reparto de estos menores, ahora, como mal estudiante, ha dejado la asignatura pendiente para la   convocatoria   del   mes   de   septiembre.  

“¡Estudie  mucho,   señora ministra...!”.

​Y en este punto, nos cuestionamos, como representantes vecinales y canarios que si: “  La solidaridad del pueblo canario ante un drama humanitario como  la  incesante llegada de emigrantes a  nuestras costas, se merece como respuesta estos continuos desplantes por parte de estos políticos de turnos”.

Una sin razón y una mayor falta de solidaridad institucional, en la que, el fiel de la balanza se decanta más hacia el ego partidistas que hacia el futuro a estos menores vulnerables, que jugándose sus vidas han arribado a nuestras costas. Abordo de unas quebradizas embarcaciones en las que, como unas sardinas enlatadas, se aprietan unos contra otros en ese minúsculo espacio   vital   que   le   ofrece   ese   cayuco   o   “ataúd   de   la   muerte encontrada de muchos otros”. Un viaje ilusionante al que estos niños, previo  pago   de  una pequeña fortuna   que  muy  pocas   familias   se pueden permitir pagar, se hacen a la mar en busca del futuro que les es negado en sus países de origen.

Pero   siendo   objetivos,   más   que   encontrar   ese   ilusionante   futuro buscado, les estamos presentando y haciéndoles partícipes de un  desencuentro   institucional,   en   el   que sus   futuros   están   siendo utilizados   como   monedas   políticas   de   cambio   y   sus   ilusiones   se disuelven entre palabras y gestos con ciertos matices xenófobos“.

Ver la realidad es mirarla de frente y no agachar la cabeza o desviar la   mirada   hacia   otro   lado”.   Porque   Canarias,   por   su   posición geográfica, es consciente de su realidad como puerta de entrada hacia   el   continente   europeo   y   vivimos   esa   realidad   como   pueblo solidario,   tendiendo   la   mano   a   aquellos   que   tras   jugarse   la   vida arriban a nuestras costas. Perdidos, tras una travesía incierta de días e   incluso   de   semanas   atravesando   la   ruta   más   mortífera   de   la migración del océano Atlántico. Hambrientos y sedientos, exhaustos, en cayuco o embarcación en la que su espacio vital está limitado y acotado por los intereses económicos de las mafias que controlan este negocio que han hecho suyo.  costumbres y su cultura. Pero, sobre todo, ilusionados, hasta el punto, que   llegan   a   aplaudir   por   haber   alcanzado   su   destino.  

Por tanto, la Unión de Asociaciones Vecinales de Canarias – 8 Islas (U.AVC),   insta   nuevamente   a   nuestros   representantes   políticos   a sentarte nuevamente, dejando esta vez, tras la puerta los intereses partidistas que les separan, y con la finalidad de cerrar los acuerdos pertinentes para que la realidad de estos menores, chicos y chicas ahora   confinados   en Canarias,   se   abra   camino   hacia   el   futuro ilusionante buscado.

 

 

Suscríbete a nuestro Podcast



Buscar en Tagoror

¿Aún no te has suscrito a nuestro podcast? Suscríbete aquí