Tenerife también existe

31.07.2019 | Santa Cruz de Tenerife

Por: Óscar Izquierdo

El presidente de FEPECO Oscar Izquierdo se muestra contundente: “No sorprende el anuncio de que las obras de la segunda fase de la Carretera de La Aldea comenzarán en septiembre, esa celeridad en poner manos a la obra es más de lo mismo, la historia interminable, estamos acostumbrados, yo diría que vacunados. La consejería de Obras Públicas del Gobierno de Canarias, siempre dando prioridad a la ejecución de obra pública en Gran Canaria. Allí no hay impedimento que valga, incluso cuando existe una enorme complejidad, ya que contempla la ejecución de ocho túneles y dos viaductos para un tramo de apenas 8,5 kilómetros.

Por el contrario, en Tenerife ante cualquier obra de carreteras, primero aparecen los escarabajos, después los noistas y por último, los profesionales de los impedimentos, que viven incrustados en la administración y en la política, que no saben, no quieren o no pueden gestionar la ejecución de las obras de carreteras y paralizan todo en nuestra isla. Así nos va, con una isla estancada, atascada e inmovilizada.  Desgraciadamente para la mayoría de los políticos canarios, sean del partido que sean, el único objetivo es engrandecer una isla, a costa de sacrificar otra. Dicen que la carretera de La Aldea es una obra de la máxima exigencia, en cambio, las obras de carreteras en Tenerife ni se les ve, ni se les espera, ni les importan, ni les interesan. Es el regionalismo desigual, que se rasga las vestiduras, cuando desde Tenerife exigimos lo que hay que hacer y nos pertenece.

No estaría de más recodar a los responsables públicos que el equilibrio territorial pasa por la igualdad de oportunidades, tanto en tiempo, como en financiación. En Tenerife, el cierre del Anillo Insular, el tercer carril en la TF-1 y TF-5, la vía de circunvalación a la zona metropolitana, son obras estratégicas, vertebradoras del territorio y unificadoras socialmente, que necesitan urgentemente su puesta en funcionamiento”.

 

 

 

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