21.09.2024 | Redacción | Opinión
Por: Rafael J. Lutzardo Hernández
No descubro nada nuevo, si pienso que el tema de la inmigración africana viene resultando un verdadero problema para el Gobierno de Canarias, pero también para los habitantes del Archipiélago canario. De la misma manera, los partidos políticos no se ponen de acuerdo, especialmente el Gobierno Central. Mientras tanto, el Presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, muestra una imagen físicamente más desgastada, pues no es de extrañar con la papa caliente que tiene encima. Lo cierto es, que hay opiniones para todos los gustos, donde una parte de la sociedad española acepta acoger a los menores emigrantes. Mientras que otra, se opone a ello.
Por otro lado, y cambiando de tema, el opositor venezolano Edmundo González, ya se encuentra en España tras pedir asilo político. Que triste que un opositor haya ganado unas elecciones generales y tenga que salir de su país por miedo de ser asesinado. Sin duda, y tal como están las cosas en estos momentos en Venezuela, mucho cuidado deberá de tener María Corina Machado, pues tanto como Nicolás Maduro y Diosdado Cabello Rondón, son capaces de hacerla desaparecer. Una mujer, que tiene los ovarios bien puestos, valiente como ella sola y la gran esperanza del pueblo venezolano para conseguir de uyna vez por toda la paz y la libertad.
De la misma manera, el analfabeto y peligroso presidente de Venezuela Nicolás Maduro, el que vio transformado en pajarito al comandante Hugo Chávez, se muestra nervioso ante las masivas manifestaciones de protestas del pueblo venezolano. Venezuela pide libertad, derechos y democracia que permita acabar con el sistema dictatorial del chavismo. Si peligroso era Hugo Chávez, más lo es aún este enfermo mental, el cual se atribuye ideologías sin tener una preparación y formación cultural del significado ideológico. Nerviosismo, que ya comienza a verse en las propias fuerzas militares del régimen de Maduro. Estoy seguro que pronto Venezuela será liberada del yugo del chavismo.
Dejando este otro tema a un lado, el mundo sigue desigual y en una permanente lucha material, egoísta, depredadora y ambiciosa. El pobre sigue siendo el sector más marginado y sufrido en este planeta tierra. Mientras que los grandes mandatarios de los países más poderosos se caracterizan por ser los más ricos; sin importales para nada el sufrimiento de la sociedad donde gobiernan. Un mundo, injusto y totalmente desequilibrado por las mentes enfermas de sus gobernantes.