El arco ministerial y la posible disolución del Senado

06.06.2018. Redacción | Opinión

Por: María del Pino Fuentes de Armas

En un momento tan complejo como el actual, debo confesar mi sorpresa y reconocimiento al nivel académico, trayectoria profesional y compromiso de las destacadas personalidades que han aceptado acompañar al nuevo Presidente del Gobierno a la hora de tomar el rumbo de España, máxime cuando se tienen ante sí retos tan importantes como el empleo, el crecimiento económico y el problema de Cataluña. Este asombro lo mantengo desde el inicio de esta histórica moción de censura, marcada por la tensión y la falta de formas de sus señorías, en las que han destacado los gestos contundentes, agresivos dialécticamente; los aplausos inadecuados, las intensas miradas de ira, asco o desprecio; el patear, gritar y abuchear desde la bancada. Y como en todo, para no generalizar, diré que hay honrosas excepciones como la de la diputada de CC Ana Oramas, que no se presta a estos juegos de circo romano.

Volviendo al Gabinete, marcado por la presencia de mujeres, pues a esta hora ya son nueve, y en el que una de las grandes sorpresas ha sido el nombre del astronauta Pedro Duque como próximo ministro de Ciencia, Innovación y Universidades, el Ejecutivo - destinado a gobernar un año y medio - parece crearse con vocación de pervivencia más allá de las eventuales elecciones anticipadas que el PSOE prometió convocar. Por lo que cabe esperar la posibilidad de que el Sr. Pedro Sánchez pueda estar pensando en disolver el Senado.

Sería ésta una jugada maestra, ya que como Presidente del Gobierno tiene facultad para ello, para convocar elecciones únicamente para esta Cámara, evitando así el “tira y afloja” que muchos españoles tememos ante las amenazas del PP, dispuesto a usar de manera implacable su mayoría absoluta en el Senado. Afortunadamente nuestro ordenamiento constitucional tiene mecanismos previstos para ello, dando al traste con sus planes, si es que éstos son ciertos. 

El Senado es la cámara de representación territorial y el actual Presidente puede, - aunque nunca en democracia han habido elecciones en exclusiva para el Senado-, al amparo del artículo 115 de la Constitución convocarlas, e incluso podría hacerlas coincidir con las municipales y autonómicas. Esto evitaría los vetos y enmiendas anunciadas a los presupuestos por parte del PP y el cumplir, parcialmente, con el deseo de nuevas elecciones que han manifestado otros partidos.

Urge que el partido conservador, expulsado del poder y en la antesala de su batalla interna por la sucesión del Sr. Rajoy, se reorganice y se disponga a presentar batalla en las elecciones que se convoquen, demostrando su fortaleza y manteniendo desde la oposición el pulso que necesita el país para salir adelante, respetando las pluralidades políticas pero ayudando a mantener el timón de la gobernabilidad desde la visión de apoyar “lo mejor para España”, pues los bipartidismos, los gobiernos totalitarios, absolutos… Jamás han dado buenos resultados.

El nuevo presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, informa este miércoles al Rey de la composición del nuevo Ejecutivo y después será la toma de posesión y el aplicar los cambios necesarios para devolver la normalidad al país. Por mi parte espero que se estudie el proceso electoral y que se adopten las medidas necesarias para encaminar la normativa, de manera que se voten listas abiertas y no se aplica la denostada "ley D'Hondt". Puede que otro gallo cantara, sobre todo en lo que a pactos se refiere.

María del Pino Fuentes de Armas

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