Triple paridad electoral, ¿para qué?

25.01.2018. Redacción / Opinión

Por: Paco Pérez

pacopego@hotmail.com

Coalición Canaria y Asociación Socialista Gomera se han mostrado contrarios a reformar la ley electoral en el Archipiélago, que es una de las más injustas que puedan existir en un régimen democrático, y se oponen asimismo a suprimir la paridad del número de diputados entre provincias, entres islas centrales y periféricas, lo cual parece una estupidez, porque en el actual sistema parlamentario quienes mandan son las distintas formaciones políticas y no se tiene en cuenta para nada el origen territorial de cada diputado.

Tanto CC como la agrupación gomera de Casimiro Curbelo lo que no quieren, en realidad, que se rebajen los porcentajes para poder entrar en el reparto de escaños (ahora del 30 insular y del 5 regional), porque ello beneficiaría la entrada en el arco parlamentario de otras opciones, como Ciudadanos, que obtuvo más de cincuenta mil votos en los últimos comicios autonómicos y se quedó sin representación en la Cámara Legislativa, algo totalmente injusto e incomprensible.

Sea como fuere, está claro que, al margen de las posibles paridades territoriales, no es de recibo que se margine de forma tan onerosa la máxima de "un hombre, un voto". En Canarias, el ochenta y tres por ciento de la población elige el mismo número de diputados (treinta), que el diecisiete por ciento restante de los votantes (otros treinta). Y es del todo ilógico que un diputado por Tenerife o Gran Canaria tenga que conseguir treinta o cuarenta mil votos para salir elegido, mientras que en El Hierro solo se necesitan algo más de mil apoyos para ser proclamado diputado.

Miren por donde lo miren, la triple paridad interterritorial no ha servido absolutamente de nada en estos primeros treinta y cinco años de período autonómico y únicamente ha sido útil para promover conflictos entre islas. En donde sí debe reinar un mayor equilibrio es en las inversiones que durante cada Legislatura destina el Gobierno de turno a cada territorio, que es donde está el verdadero "quid de la cuestión".

¿De qué ha valido que Tenerife haya tenido el mismo número de diputados que Gran Canaria o de que las dos provincias canarias estén representadas cada una por treinta parlamentarios, si sistemáticamente los tinerfeños hemos sido los grandes marginados a la hora de elaborar y ejecutar los Presupuestos del Archipiélago? A mí, que no me vengan con cuentos chinos, que aquí lo único importante son las perras. No las representatividades territoriales ni el número de parlamentarios. y Como así opino, en función de las cifras y de los hechos, así lo escribo.

Paco Pérez

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