Tagoror Digital
28.03.2024 | Santa Cruz de La Palma
El Cabildo de La Palma, a través de la Consejería de Acción Social, destina 240.000 euros para el programa de atención a personas en vulnerabilidad social y que permita paliar el sinhogarismo en la Isla.
El objetivo es impulsar la labor que desarrolla Cáritas en La Palma a través de su proyecto de Unidades Móviles de Atención en Calle (UMAC) para las personas sin techo, y que actualmente está dando respuesta a unas 180 personas en todo el territorio insular.
La consejera del área, Ángeles Fernández, señala que con esta inversión se persigue crear dos nuevos recursos alojativos y de atención a estas personas, y que vengan a reforzar la labor que esta ONG realiza en centros como la Casa Joel Álvarez de Santa Cruz de La Palma.
Estos nuevos centros estarán alojados en instalaciones adecuadas y contarán con profesionales y voluntariado que atenderán las necesidades de aquellas personas sin hogar que sean derivados por los Servicios Sociales de cada municipio, actuando con un protocolo y una hoja de ruta establecida y coordinada desde el Cabildo de La Palma y Cáritas.
Esta ayuda del Cabildo de La Palma es una reivindicación realizada por la actual consejera de Servicios Sociales desde el mandato pasado, en el que incentivó la convocatoria de la comisión del sinhogarismo, además de generar la partida presupuestaria para atender esta demanda en cuanto ha dispuesto de competencias para hacerlo.
Por su parte, el presidente del Cabildo de La Palma, Sergio Rodríguez, pone en valor que “la labor que desarrolla esta organización ha sido y es fundamental, no solo por lo que hace a lo largo del año, impulsando proyectos solidarios que tienen un fuerte impacto social; también, ante uno de los retos más importantes de nuestra historia como la erupción, en la que se ha volcado con la Isla”.
Además, insiste el presidente, con este proyecto se trabaja para dar dignidad a todas aquellas personas que siguen teniendo en la calle su hogar, a la vez que potenciar el trabajo que realizan entidades como Cáritas, “que llegan donde la administración no puede”.
