Milagros Luis Brito22.11.2017. Redacción / Opinión.
Por: Milagros Luis Brito
Ex vicepresidenta de la Zona Especial Canaria.
Desde un punto de vista económico (y profesional), ¿qué son actividades offshore? ¿Interesan en Canarias? ¿Contribuyen a diversificar la economía? ¿Qué aportan? ¿Tienen potencialidad de desarrollo futuro? ¿Disponen de amparo jurídico?
El Siglo XXI estrenó una nueva estampa en los dos grandes puertos canarios, el Puerto de Las Palmas y el Puerto de Santa Cruz de Tenerife. En el año 2002, la empresa Astican acometió la reparación del primer proyecto de una plataforma petrolífera, concretamente la Sedco Express, en el Puerto de Las Palmas. El número de proyectos fue en aumento, llegando incluso a atender diez cada año. Además de Astican, empresas como Zamakona e Hidramar se consolidaron en el muelle de la capital grancanaria.
En este nuevo contexto los puertos canarios se posicionan como una red estratégica
Las carencias de espacio provocaron que en el año 2014 una plataforma atracara en Tenerife, donde se impulsó el proyecto de Shipyards, al tiempo que comenzaba la llegada de inversores extranjeros al Archipiélago, como Rolls Royce, CCB y Otech
La caída de los precios del petróleo en el año 2015, redujo considerablemente las actividades extractivas en el Golfo de Guinea, y consecuentemente la necesidad de reparar las plataformas. El negocio, por ese motivo, alteró su perfil. Según algunas fuentes especializadas, hasta diez contratos en vigor fueron cancelados ese año, por un valor de 9,3 millones de dólares/día. Las empresas armadoras empezaron, espoleadas por la caída de los precios, a buscar lugares de reposo y revisión para esas instalaciones, mientras ajustaban costes y reorientaban sus capacidades.
En la actualidad, Canarias se ha convertido en una base estratégica para la acogida y reparación de las plataformas que tienen su ámbito de operaciones en África Occidental. La competencia y cualificación de las empresas locales, la seguridad jurídica, la capacidad alojativa, las beneficiosas condiciones de la fiscalidad y los servicios que ofrecen los puertos canarios han favorecido que el Archipiélago aparezca como una referencia internacional. Sin olvidar que la estabilidad de las condiciones climáticas permite planificar y acometer las reparaciones con antelación.
Pero no se trata sólo de reparar y alojar a la flota de plataformas y los barcos de apoyo.
El Sector Offshore está integrado por todas aquellas actividades que se desarrollan "costa afuera"; es decir, más allá de la línea de costa. Sobre ese concepto real recae en la actualidad el cambio en el modelo de negocio, que trata de superar la caída de los precios del petróleo y el parón extractivo. Buena parte del citado sector está girando hacia los parques de energía eólica marina, y el desarrollo de estudios geotécnicos, geofísicos o hidrográficos, que necesitan infraestructuras y capacidades como las que pueden ofrecer las plataformas.
La red canaria de grandes puertos se expande, incorporando los de Arinaga y Granadilla. Nuevas oportunidades de negocio se abren, por tanto, y nuevas oportunidades para empresarios, inversores y generación de empleo. La cadena de valor se está alterando. Si bien cae en segmentos como el de las perforaciones y la extracción, se mantiene la parte de reciclado de instalaciones e incrementan los orientados a actividades offshore referidas, por ejemplo, al tendido de cable de telecomunicaciones submarinas.
Todos los procesos productivos se están viendo afectados por el la inteligencia artificial y el machine learning
En este nuevo contexto los puertos canarios se posicionan como una red estratégica. Grandes compañías, con experiencia internacional, reorientan su localización para instalarse en ellos, ampliando sus actividades en áreas como la logística y reparación de equipos, nuevos astilleros de reparación general capaces de atender al sector offshore; actividades vinculadas de alto valor, como los servicios de consultoría o dirección de proyectos; tratamiento de aguas y lodos en buques y plataformas; o ingeniería especializada en robótica marina. Sin olvidar las actividades de formación y cualificación profesional específica para el desarrollo de trabajos subacuáticos. Las naves que se encuentran temporalmente paradas en los puertos canarios precisan, además, preservación y conservación de equipos, y ser ajustadas cuando vuelvan a entrar en funcionamiento.
Tres grandes ámbitos se abren para la generación de negocio y la creación de empleo en el sector de las actividades offshore.
En primer lugar, el ámbito referido a las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC). Todos los procesos productivos se están viendo afectados por el la inteligencia artificial y el machine learning, sustituyendo mano de obra humana y afianzando los "campos de producción inteligente" o los "smartfields". La robótica marina exige, por otra parte, el desarrollo de su propio software. Las grandes compañías apuestan cada vez más por el Big Data y la gestión de las enormes cantidades de información que manejan. A lo que podemos añadir el factor de internacionalización que puede suponer para empresas canarias de éste subsector, o para las propias universidades. En el Archipiélago se localiza, por otro lado, una de las dos únicas máquinas que existen en España para impresión 3D de Titanio, que se utiliza en los campos de la bioingeniería, y permite diseñar piezas a costes competitivos.
Canarias se encuentra en condiciones de transferir ese conocimiento hacia el sector offshore
El subsector de tratamiento de aguas genera expectativas singulares. Canarias, como respuesta a las necesidades que impone la Geografía, ha acumulado una enorme experiencia en el desarrollo de tecnologías del agua y en su tratamiento, especialmente orientado al mundo de la desalación y la depuración. El tratamiento del agua, la desalación, el manejo de aguas depuradas y la gestión de lodos resultan primordiales para todos los equipamientos de trabajo offshore, bien sean buques o cualquier tipo de plataformas. Canarias se encuentra en condiciones de transferir ese conocimiento hacia el sector offshore.
En tercer lugar valoramos las Energías Renovables Marinas. Nos referimos a actividades que pueden ir desde la instalación y el mantenimiento de parques eólicos marinos; la I+D+I de dispositivos de energía undimotriz, maremotriz, o la instalación y tendido de cables para campos eólicos. Y es que las grandes profundidades marinas en el Archipiélago, aconsejan el uso de plataformas flotantes para poder desarrollar el sector energético de la eólica marina.
Estas nuevas oportunidades deben centrar no sólo el interés de las empresas, sino –en nuestra opinión- el liderazgo en el ámbito de la Promoción Económica Exterior, competencia del Gobierno de Canarias. Esa valoración estratégica es la que subyace, seguramente, en el objetivo del Presidente del Gobierno de Canarias, al tratar de posicionar el Archipiélago en el ámbito de los grandes operadores internacionales, como ocurrió recientemente en Londres. El Presidente del Gobierno (…) "pulsó la opinión de estos operadores internacionales respecto a Canarias como centro logístico en el Atlántico Medio, planteándoles diversas vías de colaboración. Entre las propuestas que se estudiaron durante este encuentro de trabajo, destacan la posible celebración en Canarias de un gran evento de la industria offshore, la presentación de las Islas en foros de relieve, fundamentalmente dirigidos a África, e incluso la posibilidad de participar en las redes de estas grandes asociaciones internacionales, poniendo en contacto a empresas canarias con los miembros de las mismas".
Nos queda por delante una ilusionante tarea para transferir el conocimiento a las empresas
No son pocas las dificultades para gestionar, programar e impulsar este nuevo sector de actividades offshore vinculados a los puertos canarios, a sus infraestructuras y a sus centros de conocimiento e investigación. Además de contribuir a establecer redes de colaboración entre las grandes compañías internacionales y las empresas canarias, es necesario promover un liderazgo comunicativo claro, y el impulso de una Marca canaria única; diversa y complementaria, pero única. La otra parte del reto está en la Formación. Tenemos los centros de investigación y buena parte del conocimiento. Nos queda por delante una ilusionante tarea para transferir el conocimiento a las empresas, y para cualificar a las personas que pueden beneficiarse de esas nuevas oportunidades de empleo.
Hemos de pasar de la reflexión a la acción. Y trabajar para que las cosas de verdad pasen.
