El sombrero inquisidor
Los representantes del pensamiento único, esos a los que se les llena la boca de progresía, nombrando continuamente la palabra democracia y después contradiciéndose con los hechos, al ser meros trasmisores de la imposición permanente, acompañada de la intolerancia máxima y que ahora se les denomina neoinquisición, suelen encajar mal las críticas a su gestión, porque no comprenden que haya personas que no alaben sus pensamientos, ideología o quehacer público cotidiano y se rebelen al seguidismo vergonzante de sus fieles escuderos, por cierto, bien colocaditos como eminentes sueldólogos, allí donde agarran alguna gestión pública. Están tan imbuidos de un endiosamiento superlativo, que miran a los demás por encima del hombro, estableciéndose en unas peanas de moralidad que, si no fuera que, por lo general no son creyentes, se les podría confundir con santos de altares. Restan más que suman, no aportan sino destruyen, instauran el frentismo y la confrontación como modelo de convivencia, convirtiendo la realidad en un verdadero lodazal, que es donde suelen encontrase cómodos.
Si no hay salud, no hay economía
Nuestros abuelos siempre nos han recordado que sin salud no hay nada y conforme vamos cumpliendo años entendemos la importancia que estriba en esta afirmación tan recurrente entre nuestros mayores. Una evidencia que alcanza aún mayor importancia en la complicada realidad que vivimos en estos tiempos de incertidumbre, marcados por una pandemia global que influye en el devenir de nuestro acontecer diario.
Canarias también fue emigrante
Ni que decir tiene, que este comienzo de siglo XXI las islas Canarias están siendo invadidas por miles de inmigrantes africanos, los cuales están llegando a las costas marítimas en cayucos de la muerte. Unos inmigrantes, que salen de su país en busca de una mejor vida, como lo hicieran en otra época los emigrantes canarios y españoles, concretamente, en la España oscura de la dictadura franquista. No podemos olvidar el pasado o la Historia de lo que fue la emigración obligada por el hambre, la miseria y la persecución de la dictadura del franquismo. Eso mismo es lo que le sucede a los inmigrantes africanos, los cuales muchos de ellos mueren de frío y de sed en la mitad de la travesía del Atlántico. Ese es precio de una huida clandestina en la búsqueda de una mejor vida en Europa.
La riña.
La Riña, o El Duelo a Garrotazos, es una de las obras cumbres del universal pintor español Francisco de Goya y Lucientes. Encuadrada en sus Pinturas Negras, la escena presenta a dos personas batiéndose literalmente a garrotazos y enterrados hasta las rodillas, observándose en uno de ellos un rostro ensangrentado por la crueldad del lance.
La vida tiene sus tiempos
Por lo general, queremos que las cosas sucedan en el mismo momento que las deseamos. Nos olvidamos que la vida tiene sus tiempos y que quizás esos tiempos no coincidan con los nuestros. Porque todo tiene su momento y su lugar, llegará cuando tenga que llegar.
Abrir melones
No voy a resolverles el dilema. En este párrafo, digo. No les diré qué melones. Para eso están ustedes. Esos agentes activos que siempre he querido que sean. No sé cuántas veces lo habré conseguido. Los hay del país, de piel de sapo, amarillos… y de todos, dicen que los mejores son los de Villaconejos. Los melones, claro.
La locomotora se llama construcción
Es una realidad contrastable, que la construcción es la locomotora que arrastra a los demás sectores económicos, dándoles más alegría y posibilitándoles una actividad más enérgica. De su funcionamiento ordinario dependen, directa o indirectamente, muchas actividades económicas, que necesitan el sustento constructivo como alimento necesario. Desde que nacemos nos acompaña en nuestra convivir de una forma determinante, a todos los niveles y en todas partes. Nos ayuda, protege, haciéndonos la vida más cómoda y con mayor calidad. El bienestar social depende bastante de la actividad constructiva, como generadora de espacios confortables.
Indefensión y bajos estados anímicos
Todas las personas podemos sentirnos tristes en algún momento de nuestras vidas. Estos sentimientos de tristeza no son patológicos. De hecho la tristeza es una respuesta emocional normal, ante determinadas circunstancias difíciles de nuestras vidas.
Vencer al virus
Caminar hacia Puntallana, escuchar el sonido del Atlántico como late en su costa, el susurro del viento y el son de las chácaras y el tambor, mientras veneramos a la patrona. Esta es la historia que los gomeros ansiamos repetir cada primer lunes de octubre, pero que este año no se dará. La pandemia nos ha puesto límites en nuestro día a día, en las costumbres y en la forma de entender la realidad. Prueba de ello, es que este 5 de octubre La Gomera celebrará de una forma muy diferente la festividad de nuestra patrona.
Guías turísticos en crisis
La aparición de la Covid-19 en este comienzo de siglo XXI está haciendo estragos en la vida social, sanitaria, económica, civil y política, así como en el medio natural. Uno de los tantos sectores que se esta viendo muy perjudicado es el turismo, el cual se ha visto diezmado en todos los países del mundo ante los contagios por el coronavirus. Es por ello, que los profesionales que se dedican a la profesión de guías turísticos, ven un futuro incierto en la continuidad de la misma. Recientemente, los guías turísticos de la Comunitat Valenciana han asegurado el pasado domingo, coincidiendo con el Día Mundial del Turismo, que son una especie en peligro de extinción.